Capitulo 8: Alucinante

POV: Jacob.

La atraje más hacia mí casi con rudeza, le toque el rostro con una de mis manos y sentí como me dejaba llevar por la pasión, de modo que la bese apasionadamente, atrape su labio inferior con los míos y respire su aliento. Con uno de mis brazos, recorrí su suave espalda hasta llegar a sus cabellos para acercarla aun mas. Nessie se fue separando poco a poco.

-Jake… – susurro Ness entre mis labios.

-¿Si?.

Se separo unos escasos centímetros para mirarme a los ojos con sus hermosos ojos color chocolate. Puso sus manos a cada lado de mi rostro y dijo muy decidida:

-Quiero ir a La Push

Sonreí. Tenía tiempo sin ir ya que me la pasaba todos los días alrededor de la cabaña o en la mansión. No es que me este quejando, porque me duele estar lejos de mi Nessie, pero extrañaba La Push.

-¿De verdad? – inquirí.

-Sí, quiero ir a la playa, pero… Hay un problemita.

-¿Qué seria…?

-No le podemos contar a nadie sobre nosotros – declaro, eso era rotundo.

Me estremecí. Ella quería mantenerlo en secreto pero… ¿Por qué? De inmediato mi corazón se paro.

-No, no… – decía ella, mientras movía sus delicadas e impacientes manos por mi rostro, lo reconocí como un intento por apaciguar mi tristeza.

-Solo porque puede que Edward escuche sus pensamientos, y me niego a pensar en que se entere por otra persona – puso una cara de preocupación –. No, no puede enterarse por alguien que no sea por mí.

-Nosotros – la corregí mientras esbozaba una de mis sonrisas picaras, me encantaba ver cómo me devolvía un sonrisa –. Entonces, ¿playa?

-Sí, playa –dijo Ness con un brillo que resplandecía en sus ojos.

Fuimos a la cabaña por comida, Ness preparo carne para hamburguesa, mientras yo picaba lo que ella me daba. Para ser sincero, hacíamos muy buen equipo, charlamos y bromeamos hasta que estuvo lista la carne, porque aunque ambos seamos rápidos a la hora de correr, no se puede hacer nada para apurar la cocción…

-Jake trae un cesta de picnic de las que están allá – dijo, mientras me señalaba donde se encontraban.

Mi cara paso de la pura felicidad al espanto.

-¡Noooo, noo, noo! ¡¡¡Esa habitación no!!! ¡¡Te lo suplico – le implore, ese cuarto era… es… e-es imposible transitar por él.

Nessie me callo con la mirada mientras fruncía el ceño, y como toda una imagen de comercial, interpreto a la madre que le dice al niño “¡¡Ve a la cama jovencito!!“

No replique mas y fui a esa habitación arrastrando los pies para mostrar mi descontento. Abrí la puerta como esperando que algo me atacara y metí la mano en ese sitio tan terrorífico buscando el interruptor de la luz. Voltee a ver a Ness con la suplica aun grabada en mi ojos y ella me respondió sacudiendo la cabeza. ¡¡¡Bahh!!!. Seguí buscando el interruptor y luego me conseguí con algo filoso que se me enterró en la palma de la mano.

-Demonios – masculle irritado.

-¿Qué paso Jake?- sonó preocupada.

-Ehh, nada. Solo que este pedazo de… – busque una palabra adecuada, ya que no quería parecer grosero delante de Ness y dije – Ehmm habitación. No le gustan las visitas y pues me he encontrado con una pequeña sorpresa.

Saque el maldito alfiler de mi palma para que se curara y lo lancé con asco al piso. Introduje esta vez mi cabeza para encontrar el estúpido interruptor y ¡¡Pum!! Me di un tortazo en la cabeza con un tubo de metal…

-¿Qué demo…- murmure encontrando el maldito interruptor.

Vi con lo que me había golpeado. Si en efecto, era un tubo, para… ¿guindar telas? Alice esta total y descontroladamente enloquecida. ¿Por qué demonios querría tener un taller en casa de Bella? Loca. Así la defino yo, totalmente loca. En el interior de ese endemoniado cuarto había todo lo necesario para torturar a cualquiera que no le importe mucho la ropa, es decir la mayoría de los Cullen, a excepción, claro, de la rubita (xD). Allí había, montañas de telas, tijeras, hilos, patrones, estanterías, papeles, más papeles, diseños en las paredes. Si, digno de una loca. Y por allá, en la esquina más alejada estaban, bendito sean, las cestas de picnic. Evalué el camino que tendría que recorrer hasta allí, y había toda clase de obstáculos, alfileres y rollos de telas amenazaban con tirarme si intentaba cruzar.

Tome aliento y resignado, me encorve y contorsione la veces necesarias para llegar, y ¡¡Al fin!! ¡¡Eureka!! La cesta. Salí a trompicones de ese lugar, me ponía los pelos de puntas.

-¿Pudiste? – me pregunto Ness muy divertida con un bolso en sus brazos.

Le hice una mueca, pero igual le respondí.

-Sí, pero más n-u-n-c-a, entro allí.

Nessie se carcajeo de mi expresión mientras le pasaba la cesta y metía la comida.

-Vámonos gruñón.

Nos fuimos en el volvo de Edward, a lo que sería seguramente un día muy entretenido.

Llegando a estacionamiento, vimos algo que fue alucinante.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------

Lo lamento u.u, muchos dias sin publicar, es que he estado trabajando en algo, que segura las sorprendera :D o eso espero! Y se que dije que este cap seria largo pero, buehh, me quede dormida y se me paso el time volando. lo compensare, el viernes escribire dos largos. Aunque nunca se sabe.. y xDD ehehehe menos conmigo, pero tratare

¡¡Ah!! y otra cosa:

Estoy increiblemente agradecida, la verdad 500 visitas para mi ya es algo... Impresionante. Solo queria que lo supierais.Si sigue subiendo y llega a 1000, sere la mujer mas feliz del planeta :)

solo quiero que la historia llegue a alguien, y la haga sentir, e imaginar ;)

bueno, sin nada mas interesante que decir me despido.

Las quiero y agradesco <3<3

Pd: Vicky eres super fiel, gracias por comentar.. sigue dandome animos!